Que la abdominoplastia sea una de las operaciones de cirugía estética más demandadas no es una casualidad. Y es que esta intervención, idónea tanto para que hombres como mujeres recuperen la forma física y la imagen corporal deseada, tiene una repercusión positiva directa sobre la autoestima del paciente.
Desde clínica Dr. J.L. Vila Moriente, su clínica de cirugía estética de referencia en Santiago de Compostela y Pontevedra, le contamos todo lo que necesita saber sobre la abdominoplastia: en qué consiste la intervención, qué beneficios tiene y quiénes son los candidatos idóneos para disfrutar de sus ventajas.
Qué es la abdominoplastia y para qué se utiliza
El objetivo de la abdominoplastia o cirugía de la pared abdominal es mejorar la apariencia del torso, eliminando el exceso de grasa y haciendo que la piel flácida alojada en esta zona corporal recupere su tersura.
Presentar flacidez o un estiramiento excesivo en la zona del vientre es algo que puede suceder con frecuencia tanto a hombres como a mujeres, como consecuencia de la fluctuación brusca en el peso corporal o un embarazo, entre otras muchas causas.
Hacer que la piel estirada recupere su posición y su apariencia estética es posible gracias a esta técnica segura y con resultados satisfactorios.
Quién puede beneficiarse de una abdominoplastia
La abdominoplastia está dirigida, por tanto, a hombres y mujeres que han sufrido una drástica pérdida de elasticidad y firmeza en la zona del abdomen y desean recuperar la apariencia estética del torso.
Es importante tener en cuenta que la abdominoplastia no es un método para la pérdida de peso, sino una intervención quirúrgica que brinda la posibilidad de recobrar la figura en aquellos casos en los que no existen ya otras soluciones efectivas.
Qué tipos de abdominoplastia existen
Según su método de aplicación, podemos distinguir dos tipos de abdominoplastia: la abdominoplastia tradicional y la mini-abdominoplastia.
Esta última es la más sencilla: las incisiones son muy pequeñas y, a través de ellas, el cirujano se encarga de penetrar en el abdomen eliminando el exceso de grasa y la piel flácida. La mini-abdominoplastia se reserva para aquellas situaciones en las que la zona a tratar se reduce al área que se encuentra bajo el ombligo.
La más habitual de estos dos tipos de abdominoplastia es la tradicional, la primera que se nos viene a la mente cuando mencionamos este procedimiento. Tiene una duración que oscila entre las 2 y las 6 horas y para ella se requiere la aplicación de anestesia general. Si bien el postoperatorio cursa con seguridad y relativa rapidez, es necesario que el paciente permanezca ingresado durante un pequeño período de tiempo tras la realización de esta intervención. En ella se extrae tejido graso, piel sobrante y, como sucede en los demás casos, se consigue devolver al paciente un vientre plano y con buen aspecto.
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