Diga adiós a los complejos con la otoplastia en Pontevedra y Santiago

Antes de llevar a cabo la operación de orejas u otoplastia a un paciente, se lleva a cabo un análisis previo del caso de manera totalmente personalizada. Esto se realiza con el fin de analizar la viabilidad del caso, así como las características del mismo y la actuación y desarrollo del mismo.

En este punto, por tanto, sabemos si debemos realizar esta operación de orejas porque el paciente presenta unas orejas grandes o si, por ejemplo, lo que quiere es corregir las orejas de soplillo.

A la hora de hacer el análisis previo del posible caso de otoplastia, se realiza sistemáticamente un estudio preoperatorio, así como fotográfico.

En este paso, también se hace todo lo posible por solventar las posibles dudas que tenga el paciente, de mano de la atención de grandes cirujanos plásticos, como el Dr. J. L. Vila Moriente, un gran especialista en otoplastia en Santiago y Pontevedra con el que contamos en nuestras clínicas de cirugía estética.

Una vez realizada la exploración previa para analizar el caso, se prepara y desarrolla la operación de orejas, un proceso que conlleva mínimos riesgos para el paciente.

La otoplastia se realiza bajo anestesia local, con una sedación o incluso anestesia general según las preferencias, la edad del paciente y el consejo del cirujano. Implica una incisión disimulada en el pliegue retroauricular.

Al terminar la intervención de orejas de soplillo u operación de orejas grandes, se coloca un vendaje "en casco de motorista" que pasa por debajo del mentón y alrededor de la cabeza para mantener durante 4-5 días. Es importante que se haga caso a todas las recomendaciones que indique el cirujano, ya que lo que se busca es conseguir el mejor resultado estético con las mínimas molestias para el paciente.

Si se ha llevado a cabo una anestesia general, es necesario pasar la primera noche en la clínica de cirugía estética en Santiago. En el resto de los casos de otoplastia dependerá de la opinión del cirujano y del estado en el que se encuentre el paciente.

Lo normal y que carece de importancia es que el paciente note molestias a la hora de dormir que, por ejemplo, le impide dormir de lado, ya que ese tipo de dolores se evitan con el uso de analgésicos suaves.

Al cabo de 4-5 días tras la operación de orejas se retira el vendaje original, el paciente puede lavarse la cabeza con cuidado de no dar tirones bruscos sobre las orejas recién operadas y se pasa a usar una banda elástica alrededor de las mismas para andar por casa y, sobre todo, para dormir. La banda elástica deberá utilizarse durante 15-20 días.